"El término dérive, o “deriva” fue acuñado por primera vez por la Internacional Situacionista, refiriéndose a largas caminatas sin objetivo alrededor de sus pueblos y ciudades, reimaginando las torres residenciales, cenotafios y fuentes públicas como si se tratara de castillos de sabiduría, púas susurrantes y estanques de la eterna juventud.
El propósito de la deriva era ver belleza en el paisaje urbano y conquistar la tiranía de la planificación austera y opresiva, a través del poder transformador de la imaginación. A través de la técnica de la deriva, los situacionistas podían cambiar radicalmente su experiencia de la ciudad y convertir espacios grises urbanos decadentes en paisajes mágicos de maravilla y encanto sin límites. Aun así, quizá detuvieron demasiado pronto el ejercicio, en lugar de llevarlo a su conclusión lógica.
Una vez has pelado la cáscara de grises urbana del mundo y descubierto un mundo mágico lleno de espíritus, la siguiente fase es ver lo que puedes hacer con ese mundo, cómo puedes hablar con estos espíritus y averiguar qué podrían hacer por tí. "
- Stephen Grasso -
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En estas fechas algunas personas tienen la costumbre de poner lamparas de aceite, o velas votivas a sus difuntos, pero puede pasar que no solo reciban la visita de sus seres queridos, sino atraidos por la luz, lleguen tambien otros desencarnados olvidados por sus parientes...
Si te das un paseo por tu ciudad o pueblo veras casas abandonadas que obviamente fueron habitadas por personas que ahora ya son difuntas, y de las que nadie se acuerda. Tal vez sus espiritus ya han vuelto a reencarnarse (en ese caso estupendo, nada que hacer), pero cabe la posibilidad de que no sea asi y que esten completamente a oscuras en sus casitas cerradas a cal y canto por mucho tiempo. La compasion deberia hacernos reaccionar con una accion tan sencilla como ponerles una luz en las ventanas o en las puertas, por eso vamos a dar un paseo magico, provistos de pequeñas velas, para ayudar a esos difuntos.
En este paseo vamos a aprovechar para practicar un poco la magia de deriva, es decir caminaremos por la ciudad con los ojos bien abiertos, buscando las señales que nos marcan los espacios magicos, bien sean habitados por espiritus, bien con una carga importante de energia telurica.
Antes de comenzar el itinerario emplearemos unos minutos en un ejercicio de visualizacion: con los ojos cerrados intentaremos ver aquellos espacios de nuestra localidad que pudieran ser de esta naturaleza: un jardin con un arbol solitario, un puente, un cruce de caminos entre cuatro viejas calles, un numero magico sobre la puerta de una casa abandonada, una gargola de piedra en un balcon, etc...
Una vez que tengamos mas o menos planificado nuestro recorrido, nos haremos con una bolsa especial que tendremos para menesteres magicos (solo para recolectar o portar objetos de uso magico).
En la bolsa llevaremos unas cuentas velas blancas, cerillas de palo de madera, un bote con algo de comida para los animales no humanos urbanitas, una tiza blanca, y unas pinzas de las que se usan para darle la vuelta a los asados, con las que manipularemos los objetos que nos encontremos y nos parezcan especiales y utiles para trabajos brujeriles (a saber cadaveres de pajaros, de murcielago, dientes de perro, piedras, trozos de carteles que contienen mensajes cortados y que suponen en si mismo un conjuro del tipo "gana dinero...", "se feliz...", y cosas asi...).
Con esto ya estariamos preparados para comenzar el paseo de deriva con el que ejercitaremos nuestra vision magica.
Al salir de casa lo haremos pensando que cruzamos un portal hacia otro mundo, recordad que es un viaje chamanico... traspasamos el umbral hacia otro espacio de realidad. Caminaremos pausadamente buscando en primer lugar esas casas abandonadas donde dejaremos velas encendidas en la acera, en las ventanas o donde se pueda que no suponga peligro de incendio, y con la tiza blanca marcaremos la puerta de la casa, o bien la pared con un sigilo creado por nosotros que sea nuestra firma para asi poder recibir la bendicion del difunto. Esto es lo fundamental porque hemos salido para ayudar a los espiritus (si das, recibes), pero el paseo tiene que dar mucho de si, asi que ojo avizor y atentos a las señales, que las hay por todas partes.
Despues apuntad todo en vuestro Libro de Sombras, o bien en un diario magico expresamente creado para estas salidas.
La magia de deriva es un ejercicio muy bonito y sorprendente, y que sirve estupendamente para abrir nuestro tercer ojo y para recolectar cosas que nos seran utiles para otros trabajos.
nota: disfrutad del paseo, hacedlo con tiempo, hablad con los arboles del parque, cargaos de energia, dad de comer a los animales, y tomad fotos si podeis.
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